¿Es posible construir casas pasivas y al mismo tiempo reducir la huella de carbono?
En este artículo, quiero profundizar en los beneficios para el medio ambiente de la construcción de casas de madera. En concreto, me centraré en explicarte cómo en construir una casa de madera conseguirás, por un lado, evitar muchas toneladas de CO₂ y por otro absorber y fijar una gran cantidad de CO₂ de la atmósfera.
Los beneficios ambientales de construir con madera: el modelo Eskimohaus
Construir casas con estructura de madera, materiales naturales y sostenibles como las Eskimohaus, ofrece beneficios ambientales significativos, en concreto en lo que se refiere a la reducción de emisiones de CO₂ y la creación de un mecanismo de captura y fijación del carbono presente en la atmósfera (carbon sink). A continuación, mostraré por qué la madera es una alternativa ambientalmente responsable en comparación con el hormigón y los sistemas tradicionales que tienen una huella de carbono considerablemente más alta.
Absorción de CO₂: la madera como almacén de carbono
La madera, por su naturaleza, es un material que retiene aproximadamente el 50% de su peso seco en carbono. Esto significa que utilizar madera en la construcción no solo evita emisiones asociadas a materiales como el hormigón, sino que también actúa como almacén de CO₂.
Para conseguir madera, es necesario plantar un árbol y dejar que crezca durante unos 15 – 30 años, en este período de crecimiento, el árbol, va capturando CO₂ de la atmósfera que incorpora en su tronco. Por tanto, va fijando CO₂ atmosférico,
Cada metro cúbico de madera utilizada almacena 0,9 toneladas de CO₂. En comparación, construir con materiales tradicionales como el hormigón puede suponer emisiones de hasta 0,5 toneladas de CO₂ por metro cúbico.
Por tanto, podemos decir que un metro cúbico de madera contamina -0,9 Toneladas de CO₂ y el equivalente en construcción tradicional supone una contaminación de 0,5 Toneladas de CO₂. Por tanto, la construcción de casas sostenibles Eskimohaus como las que construimos en Papik, nos da un beneficio ambiental total de 1,4 Toneladas de CO₂, por un lado, las toneladas que se han sacado de la atmósfera al ser fijadas en el proceso de fabricación de la madera y por otra las ahorradas, evitando construir con materiales altamente contaminantes.
Ahorro de emisiones: comparativa con el hormigón
Sustituir el hormigón por madera puede reducir las emisiones en un 69% a lo largo del ciclo de vida de los edificios. Un estudio publicado en Nature Sustainability2 señala que si los edificios se construyeran principalmente con madera, podríamos evitar más de 100 Gigatones de emisiones de CO₂ globalmente hasta el año 2100. Esto sería posible gracias a la reducción de las emisiones asociadas a la producción de cemento y acero, materiales con elevadas emisiones incorporadas.
Otras ventajas: producción y transporte más sostenibles
A diferencia del hormigón, que requiere procesos intensivos en energía para la producción de cemento, la madera tiene una energía incorporada mucho menor y con frecuencia se puede producir localmente, reduciendo también las emisiones asociadas al transporte. Además, utilizar madera certificada (por ejemplo, FSC) contribuye a una gestión forestal sostenible y garantiza la regeneración de los bosques, asegurando la continuidad del ciclo de captura de carbono.
Impacto real construyendo casas Eskimohaus en Cataluña
En un proyecto típico de casa Eskimohaus, con una estructura predominantemente de madera, se puede llegar a ahorrar más de 50 toneladas de CO₂ respecto a un edificio similar hecho con materiales tradicionales. Además, estas viviendas contribuyen positivamente al medio ambiente actuando como almacenes de carbono a largo plazo y sus materiales son fácilmente absorbibles y generan muy poco residuo. Puede consultar las toneladas aproximadas de CO₂ absorbidas y ahorradas por cada uno de nuestros proyectos en el listado de proyectos realizados de Papik casas pasivas.
Conclusión
En la actual situación de emergencia por la crisis climática, cuesta encontrar relatos que nos muestren alternativas sostenibles y esperanzadoras a procesos que tradicionalmente se han fundamentado en sistemas altamente contaminantes. Es importante mostrar esta realidad que demuestran que la transición hacia un sistema sostenible es posible y es necesario implementar medidas para acelerar el cambio.
Construir casas con madera, como las Eskimohaus, no solo reduce el impacto ambiental inmediato, sino que también ofrece beneficios climáticos a largo plazo. Este modelo representa una alternativa sostenible y responsable que contribuye a un futuro más verde, evitando emisiones y absorbiendo CO₂ de forma activa. No se trata de un ecoblanqueo, sino de un modelo de negocio que se basa en la sostenibilidad, generando entornos sostenibles.
Fuentes y estudios de referencia:
- Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico: https://www.miteco.gob.es/es/cambio-climatico/temas/mitigacion-politicas-y-medidas/edificacion.html
- Impacto global de la construcción con madera segun Nature Sustainability: Este estudio analiza cómo el uso de madera en lugar de hormigón podría reducir hasta 100 gigatoneladas de CO₂ a lo largo del siglo XXI. Puedes acceder a los detalles del estudio a través de Nature Sustainability.
- Comparativa de las emisiones del hormigón y la madera: El informe señala que cada metro cúbico de madera utilizada puede almacenar hasta 0,9 Toneladas de CO₂ mientras que el hormigón genera aproximadamente 0,5 toneladas de CO₂ por metro cúbico. Más información disponible en ScienceDaily.
- Guia de Carbono de Wood Products Concil que ofrece herramientas para calcular el impacto del carbono en edificios hechos de madera, incluyendo cálculos detallados sobre el ahorro de emisiones. Consulta el informe completo en WoodWorks.